Licenciada en Educación Física, estudiante de fisioterapia, y tuvo su última participación en el 2019 jugando para Cordón Zuleika vuelve a las canchas para defender al «rojo de Pocitos»
Su niñez y el acercamiento a la naranja
Mi infancia la viví en Cordón sur/Palermo. Vivía con mi padre, mi madre y mi hermana. De chica transité por muchos deportes, desde la Gimnasia Artística y el Tenis hasta el Handball y el Básquetbol. Siempre me gustaron sobre todo los deportes colectivos.
Un día volviendo en el ómnibus, con mis compañeros de escuela, escuché a dos amigas charlar de que se veían esa tarde en la práctica de Welcome. Llegué a casa toda entusiasmada con la idea de ir, así que mis padres me llevaron.
¿Cómo se dio tu llegada al deporte?
Debo admitir que no recuerdo mi primera práctica, recuerdo que fue en el año 2002. Empecé en el grupo de la escuelita de la tarde, un grupo mixto de niños y niñas del barrio. En ese momento estaba Marcelo Galicchio y enseguida se incorporó Santiago Canto de DT.
Estuve un año en ese grupo y al siguiente año entrenaba a las 17 hrs con el grupo de minis de varones y luego me quedaba a la escuelita. Ya al siguiente año comencé el liceo y pude sumarme al grupo del Femenino que era a las 15 hrs y muchas veces me sumaba además con un grupo de Defensor Sporting Club que dirigía también Santiago.
Mis amigas de la escuela dejaron el deporte, pero me fui haciendo amigas nuevas y así lo hice en otros equipos años posteriores. Creo que ese fue el motor principal por el que mantuve el deporte tanto tiempo.
La pasión por el deporte
En el 2019 estuve en Club A. Cordón y tenía intención de dejar de jugar, pero no pude sostener la idea. Como si fuese una adicción. Este año comencé en el Club Trouville, duró poco el inicio una semana de práctica y se suspendieron las actividades presenciales. De todas maneras, continuamos entrenando por zoom con la misma frecuencia que en la presencialidad. Pero sin dudas hubiese sido importante encontrarnos en la cancha, más que nada por tratarse de un grupo nuevo.
Soy docente de Educación Física en la escuela 58 de La Teja y en el Colegio Santo Domingo en secundaria, soy estudiante de fisioterapia y además tengo un emprendimiento con mi hermana. El emprendimiento es de artículos de surf, más bien ponchos cambiadores para salir del agua, los hacemos nosotros. Nuestro insta es @soulsisters.ponchos. Es cuestión de organizarse uno para poder hacer todo lo que a uno le apasiona.
Pasado y actualidad
No recuerdo que antes hubiera gran rotación de jugadoras. Fue un momento donde había pocas jugadoras activas, muchas de las cuales han vuelto con el tiempo. Quizá no éramos 3 equipos. Pero éramos muy pocos. Malvín y Aguada fueron los dos equipos fijos que sostuvieron durante mucho tiempo el femenino (en condiciones muy dispares).
Después había un grupo de jugadoras que se mantenían juntas y rotaron por varios clubes, un año en cada institución. Hace muchos años se jugaban en varias categorías, entonces ibas el sábado a jugar un partido en infantiles y si te iba bien jugabas con cadetas y juveniles. Eso luego se perdió y se mantuvieron poquitos equipos solo con mayores. Hace unos años se viene recuperando la parte de formativas femenina y sostener eso creo que ha sido fundamental para que crezca el femenino mayor y en su totalidad.
¿Cuántos equipos eran cuando comenzaste?
No éramos muchos equipos, no me acuerdo si cuadrangular o éramos cinco equipos capaz pero muy poquitos, hubo un año en el que Malvín y Aguada llegaron a presentar dos equipos cada uno para poder lograr mayor competencia. Y las formativas que antes se hacían en realidad se fueron perdiendo hubo un momento en que sólo Aguada y Malvín mantenían las formativas y ahí estábamos yo dirigiendo las formativas de Aguada y estaba Sabina Bello, que sigue estando, dirigiendo en Malvín.
Hacíamos encuentros entre nosotras coordinabamos y decíamos: nos juntamos. en Malvín o vamos para Aguada y tratábamos de armar algo para que las gurisas tuvieran la oportunidad de encontrarse. En alguna oportunidad participamos también de algún encuentro de esos que se hacían de Minis en Flores o alguna cosa así, pero no había mucha cosa en cuanto a la competencia de formativas como si hay ahora la U19 y otras categorías más por suerte y cada vez hay más cantidad de chiquilinas.
Nos llegamos a inscribir en serie 7 de formativas para poder competir y jugábamos en cadetes contra equipos masculinos.
¿Cómo ves hoy el nivel y la evolución de la actividad femenina en el deporte?
El nivel del básquetbol femenino viene creciendo. Recuerdo años anteriores cuando solamente 3 equipos participábamos del torneo, estar viviendo esto hoy, con la trascendencia que está teniendo y el nivel que hay es increíble. Este crecimiento se ve reflejado en las nuevas generaciones, cada vez hay más jugadoras, aumenta el compromiso y la competitividad.
Cuando inicié en el deporte, pensar en tener preparación física con Lic. en Educación Física era un lujo. Sin dudas es importantísimo que se profesionalice, la inclusión de la preparación física, fisioterapeutas y psicólogos deportivos genera grandes avances en el nivel deportivo.
¿Te sentís una de las pioneras?
Sinceramente no me siento pionera de las nuevas generaciones. Creo que hay otras jugadoras que han tenido un rol más protagónico en ese rol que el que tengo yo. Quizá lo importante ha sido mantenernos jugando y peleando por un lugar para el deporte femenino. Creo que todavía faltan muchos escalones para subir, pero estamos en camino.
Trouville, un nuevo proyecto
Este equipo es una mezcla de jugadoras de diferentes edades y diferentes experiencias que venimos de jugar en otros equipos y hoy tenemos la suerte de cruzarnos en acá.
Si bien es un equipo nuevo, hay muchas jugadoras que vienen compartiendo equipo en Club D. Paysandú, algunas que se han cruzado en Malvín y otras hemos transitado muchos años juntas en Aguada y Cordón. En este momento lo más importante es conocernos, armar un grupo que sin dudas colabora muchísimo para generar dinamismo en el juego. Llegué a Trouville porque el DT, Gastón Silva se comunicó conmigo.
Teníamos, además, alguna idea a través de Pablo Morales (coordinador de Trouville) quien fue DT de algunas de nosotras en Aguada.
¿Qué esperas como equipo para este año? ¿Y en lo personal?
Espero por sobre todas las cosas disfrutar del deporte. Seguir aprendiendo. Consolidarnos como grupo y equipo deportivo para ser competitivas en un torneo que promete alto nivel. A nivel personal, espero poder estar a la altura del torneo que se viene. Mejorar sobre todo mis características ofensivas. Y sin dudas aportar al grupo lo que se precise.